Sinopsis de El caminante (Novela) Si existe una obra en la literatura moderna japonesa capaz de producir en el lector una tensión psicológica tan profunda como para provocar una reflexión sincera sobre sus relaciones familiares y personales, esa novela es El caminante. Un hombre atrapado en sus relaciones familiares, que no parece encajar en ninguna parte, alienado y abatido, sumido en una lucha constante para encontrar la manera de obtener algo parecido a la paz interior.
El caminante narra la historia de un peculiar y sutil triángulo cuyos vértices conforman Jiro, su hermano Ichiro y la esposa de éste, Nao. Atrapados entre tradición y modernidad, los personajes deambulan por un Japón hambriento de cambio y de progreso que se enfrenta a una metamorfosis demasiado rápida. La angustia vital que atormenta al protagonista, Ichiro, es la de la soledad del hombre inmerso en una sociedad que avanza sin tregua, sin otorgar nunca un respiro. Su mujer, Nao, escoge el camino de la pasividad y del desafío silencioso y frío. Finalmente Jiro, cuyos gestos son imperceptibles susurros de amor velado hacia su cuñada, es testigo del desplome del frágil estado mental de su hermano: «Parecía un pez varado en la arena dando coletazos en su fútil lucha por la vida».
El caminante trasciende fronteras y refleja la angustia del ser humano moderno aislado irremediablemente de su familia y que lucha por desarrollarse plenamente en una sociedad cuyos valores tradicionales se desmoronan para abrir paso al individualismo que comienza a surgir en el nuevo Japón de comienzos del pasado siglo. |
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